Vivimos tiempos difíciles, tiempos que desde la solidaridad
serían mas fáciles, pero nos empeñamos en separarnos, pensando que sin
ayudarnos como país, separándonos de la peste nos hará menos daño. Lo que
sucede es siempre lo contrario, aquí el dicho de divide y vencerás se aplica de
manera genial, el enemigo siempre busca eso, dividir, distraer la atención,
echarle la culpa al vecino.... "Afirmar que mi destino
no está ligado al tuyo es como decir: "Tu lado del bote se está
hundiendo".(Hugh Downs)
En fin, esto viene al caso para hablar de los nacionalismos,
independentismos y demás términos. Este no es el momento, por muy lícitas que
sean las pretensiones, por muy lógicas que sean, este es el momento de la
unión, al fin y al cabo tenemos un enemigo común, no hay que dejar que los
políticos tapen su nefasta gestión detrás de populismos baratos.
Es muy fácil dejarse llevar cuando atacan a nuestros
sentimientos y nuestras creencias. Pero debemos de ser inteligentes, el
problema Catalán o Vasco no lo han generado los Extremeños, los Andaluces o
Buda reencarnado, es un problema de gestión política, es un problema de
financiación bancaria, es un problema del mismo sistema capitalista, en el que
no interesa una clase media, inteligente, con estudios, con voz propia, y este
no es un problema de identidad como pais, de lengua o social aislado, es un
problema Mundial, y esto, sin cohesión social, va a ser imposible de solucionar
mientras el pueblo no alce su voz al unísono, y sigamos siendo gobernados por
sociedades encubiertas tras partidos políticos aparentemente democráticos.
Cuidado con los cantos de sirena, no nos dejan escuchar el
sonido de las olas al romper contra las rocas.
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